El día acompaña la ocasión, un día gris, frío y que no ha parado de llover. Es la analogía perfecta al caos en el que se convirtió mi vida.
Soy un manojo de nervios, de euforia, de melancolía y sonrisas. Un cóctel difícil de tragar.
Y aunque estoy llena de responsabilidades, y que no me alcanzan las horas del día para cumplirlas. Los pensamientos son recurrentes, y tu implacable presencia electrónica se hace cada vez mas difícil de soportar.
Estoy en el mejor peor estado de todos, el único que me sale bien: la
EU FO RIA. Esa búsqueda incesante del optimismo!
Por dentro no soy más que un montón de vidrios rotos a punto de cortarme, un millón de piezas de rompe cabezas todas desordenadas y dadas vuelta. No soy más que una pequeña niña indefensa que ha perdido el camino de regreso a casa.
Por fuera soy una persona fuerte, de hierro, invencible. Dispuesta a enfrentar la peor de las tempestades y a salir aireosa de cada momento. Una persona que nunca borra su sonrisa, que busca el optimismo hasta en el momento de mayor oscuridad. Una persona valiente, con el coraje suficiente para salir adelante; para vencer a todos los fantasmas del pasado, capaz de asesinar todos y cada uno de sus recuerdos. Una persona que no va a parar de caminar hasta llegar a la meta y vencer todos los males que le aquejan. Alguien incapaz de derramar una mísera gota de llanto por una persona que no vale la pena.
Por dentro siento odio, rencor, decepción, traición. Dolor y tristeza, una melancolía aguda. Por fuera jamás lo demostraría.
Hoy hice una explosión interna. Ya voy por el día 14 desde que tome la decisión más importante, la que marca un final. Pero que también marca un comienzo, una nueva etapa, nuevos caminos y una nueva oportunidad.
Aguante 14 días y recién hoy hice mi explosión. Hoy hice mi
CATARSIS. Sé que la necesitaba, que tarde o temprano iba a suceder. Necesito sacarme toda esta mierda que tengo encima, que me esta ahogando y me esta matando.
Cada día que pasa la decepción es más grande, es más incomprensible y más dolorosa. Porque se agregan cada vez más cosas a la lista y no deja de sorprenderme.
Tengo que entender esto y aceptarlo, ver la realidad con la vista clara. Dejar de mentirme y engañarme a mi misma. Aunque el dolor de darme cuenta la clase de persona que sos, a quien tuve a mi lado todo este tiempo y las cosas que sos capaz de hacer, una persona sin escrúpulos ni remordimientos. Son cosas que me asustan un poco, es como estar durmiendo con el enemigo. Durante todo este tiempo sin saberlo, porque con tu manipulación solucionabas todo, lo escondías. Pero ahora puedo por fin sacarte la careta, aunque siento que te desconozco, que no se quien sos. Al menos sé y tengo la certeza de que definitivamente no sos quien mostrabas ser y no sos quien yo creía que eras.
No te das una idea del dolor que eso genera, de la bronca y la impotencia. De ver como tus mentiras me rodean, y vos ahí en calma, siempre en tu rol de víctima, siempre manipulando la situación.
Me das asco, juro que en el momento que descubrí tantas cosas sentí un malestar en el cuerpo, como si quisiera
VOMITARLO TODO, vomitar nuestra relación, vomitar todos estos años malgastados en vos, vomitar mi estupidez y mi ceguera constante, vomitar tu pasividad, vomitar tu mentira. Como una manera de sacarme de adentro, de eliminar todas esas cosas que me hacen tanto mal. Sacarme el
veneno que me hiciste tomar.
A veces pienso y no entiendo cómo pude ser tan ingenua, tan buena, tan segura, tan ciega, tan comprensiva. tan, tan, tan
¡IDIOTA!
Hoy lo que siento no es dolor, ni es tristeza por terminar con esta historia. Lo que siento es
desconcierto, es sentir que todos estos años viví algo que estaba cubierto de mentiras y de engaños. Que le entregue mi vida a una persona que fingió ser alguien durante todo este tiempo. Que ame a alguien que no existía, ame algo que no era cierto.
Tengo impotencia por no poder hacer nada, por no poder cambiar las cosas, tengo bronca porque no puedo aceptar la realidad, porque me cuesta entender y dar un paso al costado.
Lo que más bronca me da es pensar en cómo actuaste vos durante todo este tiempo, sos el perfecto caso de Dr. Jekyll and Mr. Hyde. En un lugar y momento sos una persona, y en otro con otras personas sos otro totalmente diferente. Inventar una vida paralela, historias y momentos que nunca existieron. Creo que era una realidad irreal que en algún punto hasta vos te la creías. Realmente no puedo creer que haya una persona capaz de hacer ese tipo de cosas, sin escrúpulos, sin moral, sin conciencia. Sin importarle nada, hacer las cosas sin pensarlo, no medir las consecuencias de tus actos ni el daño que podes causar.
Se que es la mejor decisión que podría haber tomado, me tome mi tiempo para dejar de quererte, para ya no extrañarte ni necesitarte. Poco a poco me fui alejando de vos, fui poniéndole fin a esta historia de manera sucesiva. Fue un proceso, en etapas, fue definitivamente la mejor manera. Para que YO no saliera perjudicada, sin daño ni dolor.
Y cuando me di cuenta que ya no te amaba, que todo se había apagado en mí, que nuestro amor era una mentira, que no necesitaba nada de vos. Una vez que junte el coraje y la valentía, que me sentí lo suficientemente fuerte para tomar una decisión definitiva. Sin titubear y sin dar marcha atrás. Fue ahí, en ese exacto momento en el que hice el corte final, el definitivo. El que durante tanto tiempo, de manera inconsciente había venido planeando. No fue fácil mantener mi decisión, pero mantenerme firme en mis convicciones es lo más importante, no dejarme caer ni vencer por nada.
Sé que a veces tendré un mal día, un día en el que se me revuelva todo y vuelva a sentir la pena y el dolor, la bronca y la impotencia, la gran confusión. Hoy es uno de esos días.
Pero se que todo se pasa, que con el tiempo aprendemos a sanar las heridas y a cicatrizarlas. Que estos días malos van a ser cada vez menos y ya no tan frecuentes.
Se que llego la hora de que los puntos suspensivos de esta historia se conviertan en un
punto final.
Que poco a poco esta vela se va a terminar de apagar.
